Warren Buffett, conocido como el Oráculo de Omaha, sorprendió al mercado con un cambio dramático en su estrategia de recuperación. Recientemente, si asumimos que Berkshire Hathaway, su empresa, vendió más del 50% de sus acciones a Apple, lo que provocó que la tecnológica perdiera un 6,5% de su valor. Ahora Buffett está impulsando agresivamente los bonos de corto plazo, acaparando más de esas acciones como la propia Reserva Federal.
Berkshire Hathaway tiene un déficit de 234.600 millones de dólares en letras del Tesoro, un aumento del 81% desde finales de 2023. Este cambio no es aislado; Buffett acumula 42.000 millones de dólares a largo plazo. Cuando se le preguntó, Buffett dijo que preferiría estar preparado para todas las eventualidades.
El banco estadounidense señaló que la economía está mostrando signos de desaceleración y puede recurrir a la Reserva Federal para revisar sus acciones. Con tasas de interés estables, muchos inversores prefieren inversiones a corto plazo que generen buenos rendimientos rápidamente. Buffett considera esta estrategia la opción más segura en el entorno actual.
El rendimiento de las letras del Tesoro a corto plazo es alto, lo que podría generar 12.000 millones de dólares al año para Berkshire. Ahora la atención se centra en cómo activar la Reserva Federal y qué impacto tendrá eso en esas actividades. Mientras tanto, el mercado se prepara para posibles ajustes en las próximas reuniones.