La ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) Yasmín Esquivel se ha negado a dejar su cargo como funcionaria pública tras la polémica en torno al plagio de su tesis: “Participaré en la sesión de hoy y en todas las posteriores. Y hoy, más que nunca, por la seguridad de las personas”. Esquivel ha defendido con unas escuetas declaraciones a su llegada a la Corte que no tiene por qué avergonzarse, y ha rechazado rotundamente la resolución presentada por la Universidad Nacional Autónoma de México, que concluyó que la tesis realizada por el ministro en 1987 era una copia “sustancial” de otra presentada en 1986 por el exalumno de la Facultad de Derecho Édgar Ulises Báez.
En sus breves palabras a MilenioEsquivel ha argumentado que no fue notificada de ningún dictamen o acto por parte de la entidad, por lo que ha seguido defendiendo la autoría de su obra: “No hubo procedimiento, no hubo valoración de la prueba que determine fehacientemente que la tesis es mío.” El Comité de Integridad Académica y Científica de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón, institución perteneciente a la UNAM, fue el encargado de realizar el dictamen pericial de ambas tesis, luego de evaluar “elementos de construcción, desarrollo, estilo, contenido, temporalidad, congruencia y manejo de la información de ambas tesis, así como el análisis de los archivos físicos y digitales institucionales y la documentación exhibida por las partes involucradas”.
La copia de la tesis de Esquivel ha abierto la polémica sobre la posibilidad de retirarse de la carrera de Derecho. Este lunes la Secretaría de Educación Pública (SEP) ha devuelto el caso a la UNAM. El secretario de Gobernación, Adán Augusto López, ha aclarado que la SEP no está facultada para cancelar el título. “La Dirección General de Profesiones no está facultada para cancelar ningún título, en todo caso puede cancelar la inscripción de un título, pero debe haber una resolución judicial o una inhabilitación, que la UNAM no ha cumplido”, dijo Palacio. Nacional.
Las declaraciones del ministro Esquivel se dan a pocas semanas del inicio de una polémica que ha afectado incluso a la propia UNAM. El profesor encargado de tutorizar la tesis de la ministra —y la de Báez— negó las acusaciones que se hicieron sobre el caso, e incluso calificó la denuncia contra Esquivel como “un ataque a la mujer”, además de “algo tonto e increíble”. EL PAÍS pudo comprobar que Rodríguez asesoró al menos seis tesis plagiadas entre 1986 y 2010. Además, identificó otro trabajo idéntico al de 1986 (realizado por Báez), presentado en 1993 y revisado por un tutor diferente.
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